Branded content: aportando valor a tu marca
El mundo del marketing es apasionante, divertido y está siempre activo. Eso quiere decir que está siempre en movimiento, ofreciendo soluciones y atractivos muy dinámicos. El marketing quiere acercar productos o servicios a usuarios y consumidores, para mostrarles sus bondades y despierte el interés hacia ellos.
Hay muchas técnicas de marketing y a continuación, vamos a descubrir diversas maneras de transmitir toda esa información. Se puede realizar una campaña de publicidad que una los formatos escritos y visuales a través de la imagen, o incluso audiovisuales y multimedia. Algunas herramientas que pueden servir para este fin son, por ejemplo, el branded content y el marketing de contenidos.
¿Qué significa branded content?
Entre todas esas herramientas que encontramos para realizar acciones comerciales y de marketing, encontramos el branded content. Este también recibe la denominación contenido de marca, es decir, un contenido que ayuda a reforzar la marca y que aporta valor a todo lo relacionado con ella.
Su función principal es transmitir una imagen de marca, así como el mensaje que se quiere hacer llegar a los posibles clientes o usuarios de los productos o servicios. El branded content es tan importante que se ha convertido en uno de los principales caballos de batalla en la difusión de la imagen de marca.
Estos contenidos han de estar relacionados con la marca y con los servicios o productos que ofrecen, pero no tienen por qué ser contenidos que llamen al consumo directamente. Las estrategias de contenidos quieren ofrecer información acerca de todo lo que representa la marca y generar interés por lo que vende.
Pero lo hace de manera tangencial, buscando ofrecer siempre a su público objetivo un contenido que le resulte práctico, útil y fácil de entender. El propósito de esta herramienta de marketing no es ofrecer un anuncio o un artículo publicitario, sino ir más allá.
Lo que convierte en algo muy interesante esta herramienta es que, al contrario de los contenidos destinados a vender directamente, se ofrece información que resulta interesante a los usuarios. Es una forma de reforzar el poder de la marca, pero sin ofrecer directamente el producto que se intenta vender.
¿Resulta confuso? Pues no lo es tanto. El branded content funciona de manera que el usuario no se siente invadido y así, no rechaza la información de entrada. El contenido de marca trata temas relacionados con la marca y su producto, pero lo hace de manera práctica y sin ser intrusiva.
No se trata de decir “¡COMPRA!”, sino de ofrecer contenido relacionado. Una manera de plantear una estrategia de contenido de marca es aportar información relacionada con un producto, sin que ese producto esté presente o se utilice de forma activa.
La presentación de la filosofía de marca, cómo utilizar el producto, mostrar una historia que profundice en el origen de la marca, incidir en un momento especial de la empresa… todo este tipo de contenidos refuerza y potencia la imagen de marca y de la empresa.
Con todo ello, el receptor del mensaje siente que forma parte de la propia empresa y que le están contando cosas relevantes sobre ella. Puede sentir que es importante para la compañía, que se centra en su felicidad y se vuelca en cumplir con sus expectativas.
Los objetivos del branded content pueden dividirse en estos aspectos:
- Posicionamiento de la marca en el mercado: el contenido de marca se utiliza para diferenciarse respecto a otras. El receptor nota esa diferencia, le aporta un valor añadido y le ayuda a la hora de elegir cuando tiene que comprar.
- Mejora el valor de la marca: la marca se percibe no solo como una buena opción para ser elegida, sino que además ofrece una imagen de empresa relevante en el sector.
- Marketing directo: si el contenido es interesante y relevante para muchas personas, se produce una conversación entre ellas. A raíz de ese intercambio de opiniones, se crea una difusión directa a los posibles consumidores, sin que estos perciban que son prescriptores ante sus conocidos.
- Recuerdo espontáneo: el nombre de la marca, su imagen o su reputación está presente en muchos momentos diferentes. Puede ser en el momento de hablar con alguien sobre el mensaje difundido o en el momento de la compra. De esa manera, la marca se convierte en una referencia durante las conversaciones que toque temas relacionados.
Diferencias con el marketing de contenidos
Otra de las herramientas de marketing que puede ayudar a potenciar la marca es el marketing de contenidos. Aunque es algo muy similar, presenta importantes diferencias con el branded content.
En el caso del marketing de contenidos, se crean textos, piezas audiovisuales y otros mensajes en los que la marca no está presente. Y pese a ello, todos esos contenidos están relacionados con lo que ofrece la empresa.
En este caso, es importante que el lector o el público que llega hasta los contenidos no llegue por conocer a la marca. La idea es que el usuario encuentre los contenidos porque le aportan una información práctica y útil acerca de un tema que le interesa.
En las acciones de marketing de contenidos se elaboran mensajes que de entrada no se nombra ni se relaciona con la marca. Pero el tema utilizado y la manera de tratarlo acaba siendo relacionado con la marca o con uno de los productos de la misma.
Así pues, la diferencia entre branded content y el marketing de contenidos es que el primero sitúa a la marca como principal argumento y el segundo ofrece información tangencial que acaba estando relacionado con ella.
Ventajas de branded content para la empresa
La empresa debe preparar una estrategia de contenidos de marca cuidadosamente. La creación de este tipo de campañas necesita una planificación medida y con unos objetivos claros. Un plan de contenidos hará que los resultados se puedan ver en un período de tiempo razonable.
La difusión de estos contenidos ayuda a que la marca sea más conocida, se reconozca con mayor facilidad y se cree una necesidad ante los clientes o usuarios de los productos o servicios. Los contenidos permiten alcanzar a una base de clientes que recordarán la marca y sentirán que todo lo que ofrece es importante y de calidad.
Ejemplos y estrategias de branded content
Hay muchos ejemplos de contenido de marca. Recordemos que son esas acciones que ofrecen mensajes de confianza y que consiguen que la marca se posicione por encima de otras. Por ello, es importante establecer una estrategia de branded content. Seguro que pueden llegar a sonar situaciones en las que las marcas se han colocado por encima del producto y dan nombre a este. Estos son algunos ejemplos.
Cuando se toma un refresco de cola, probablemente se pida una marca concreta, aunque se sirva una de la competencia. No se pide como “refresco de cola”, sino como si fuera esa marca que es “la chispa de la vida”.
Ocurre lo mismo con los yogures, por ejemplo, en los que una marca de origen francés ha conseguido ser identificada con el propio producto. Los coches eléctricos, no importa de qué marca sean, se asocian con una muy concreta, que solo dispone de vehículos de ese tipo.
Todo eso es obra de los responsables de marketing, que trabajan para que la marca se asocie a elementos diferentes y que hagan que el consumidor la asocie a ellos. Desde la música, slogans e imágenes, hasta sensaciones al consumir el producto o al hacer uso del servicio.
Los mensajes consiguen convencer a los receptores de que la marca está unida a todo ello para que al final, surja esa asociación sin necesidad de emitir un mensaje directo o explícito. Ese es el éxito de una marca que ha preparado una estrategia de marca potente y bien realizada.
La marca, un valor reconocible
Todas las acciones de marketing han de servir para transmitir un mensaje claro: los productos de la marca son necesarios. Pero en ocasiones es más importante que sea la marca la que esté por encima del producto.
Esa es la función del contenido de marca. Con un uso bien planificado y la ayuda de profesionales, se puede conseguir que cualquier persona relacione un producto, una característica concreta o una sensación agradable con la marca. Y con ello, se tiene ganada una batalla muy importante y decisiva en la guerra de la competencia.